Muerte de Samantha Fonseca enciende alarmas

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En un trágico episodio que destapa la cruda realidad para las mujeres trans en México, el transfeminicidio de Samantha Fonseca, activista y exaspirante a senadora por Morena, ha encendido la alarma sobre la violencia sistémica que enfrenta la comunidad trans en el país. México, siendo el segundo peor país del mundo para las mujeres trans, enfrenta un panorama desolador con un alarmante 55% de los asesinatos en la comunidad LGBT+ concentrados en este grupo.

Samantha Fonseca fue ejecutada en la alcaldía Xochimilco de la Ciudad de México después de una visita al Reclusorio Sur, desencadenando una ola de protestas exigiendo justicia y un cambio en el discurso que no reconozca a las mujeres trans. Este trágico evento resalta un problema más amplio: la violencia sistemática contra la comunidad trans en México.

Pero la alarma de transfeminicidios en México se enciendo debido a que la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCDMX) revela que, de 2008 a 2022, se han promediado 46 transfeminicidios anuales en México.

En comparación con Brasil, México se encuentra por debajo, pero los números son igualmente alarmantes: 649 casos en México frente a 1,749 en Brasil durante el mismo periodo. Además, 10 estados mexicanos documentaron 209 crímenes de odio en 2019 contra la comunidad trans, con un impactante 44.5% resultando en homicidios.

Datos de 2020 señalan que el 55.2% de los homicidios contra la comunidad LGBT+ por preferencias sexuales fueron cometidos contra mujeres trans. Para 2021, la tasa de transfeminicidios supera la de feminicidios si se vincula con el 100% de cada una de estas poblaciones. Con 316,250 personas trans en México, los últimos cinco años registraron 250 homicidios contra mujeres trans.

Alerta del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio:

En 2022, el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra Personas LGBT+ reportó 305 hechos violentos, incluyendo 22 desapariciones y 62 casos de asesinatos, atentados y suicidios. La falta de comunicado por parte del Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred) contrasta con la postura de YAAJ México, que condenó el transfeminicidio de Samantha Fonseca.

Ante los recientes hechos militantes de Morena, incluyendo a Clara Brugada, expresaron su pesar y compromiso con la lucha de Fonseca. Sin embargo, la violencia no letal persiste, como el reciente caso de Paola Suárez, quien fue agredida a principios de 2024, destacando la urgencia de abordar esta crisis.

En resumen, el transfeminicidio de Samantha Fonseca destapa una profunda crisis de crímenes de odio en México, exigiendo una acción inmediata para cambiar el curso de la violencia sistemática contra la comunidad trans en el país.