Trump aún no descarta aranceles a México el 1 de febrero
Tiempo de lectura: 3 minutosLa Casa Blanca confirma que Donald Trump mantiene la posibilidad de imponer aranceles del 25% a productos de México y Canadá si no hay avances en migración y control de fentanilo.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantiene su postura sobre la imposición de aranceles del 25% a productos provenientes de México y Canadá a partir del próximo 1 de febrero. Así lo confirmó Karoline Leavitt, vocera de la Casa Blanca, quien reiteró que esta medida sigue en consideración a menos que ambos países colaboren en resolver cuestiones clave relacionadas con la migración y el tráfico de fentanilo.
Presión comercial y migratoria
Durante una conferencia de prensa realizada el 28 de enero, Leavitt aseguró que Trump ha discutido la decisión con su equipo y que la fecha límite sigue en pie. En paralelo, también se está evaluando la posibilidad de imponer nuevas tarifas a productos provenientes de China, en un contexto de crecientes tensiones comerciales.
Este anuncio llega apenas días después de que Trump, en el Foro Económico Mundial celebrado en Davos, Suiza, afirmara que las negociaciones con México marchaban bien. No obstante, la confirmación de la Casa Blanca sobre la inminente aplicación de aranceles ha generado preocupación entre socios comerciales y analistas económicos.
La administración Trump ha vinculado repetidamente la política comercial con la migratoria. En este contexto, el mandatario insiste en que tanto México como Canadá deben reforzar sus medidas para contener el tráfico de fentanilo y reducir el flujo migratorio hacia Estados Unidos.
Canadá se prepara para responder
Canadá también se encuentra en el centro del debate comercial. En las últimas semanas, Trump ha extendido sus críticas hacia el gobierno canadiense, argumentando que su política económica no está alineada con los intereses de Estados Unidos.
Ante esta situación, la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, declaró que su país está desplegando estrategias diplomáticas para evitar la aplicación de aranceles. Además, advirtió que, en caso de que estas tarifas entren en vigor, su gobierno ya cuenta con medidas recíprocas preparadas.
“Estaremos listos desde el primer día”, afirmó Joly, asegurando que su país trabaja en coordinación con la Unión Europea (UE), el Reino Unido y México en busca de una respuesta coordinada. En este marco, la ministra se reunirá con el secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, para abordar el tema y explorar vías diplomáticas para mitigar el impacto de la medida.
Endurecimiento de políticas migratorias
Además de las presiones arancelarias, la Casa Blanca ha intensificado las políticas migratorias internas. Karoline Leavitt informó que el gobierno de Trump está reforzando operativos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y restringiendo el acceso a préstamos y subvenciones federales para ciertos sectores, como parte de una estrategia para acelerar las deportaciones.
Estas iniciativas forman parte de una serie de órdenes ejecutivas firmadas recientemente por Trump, alineadas con sus promesas de campaña. El mandatario ha dejado claro que su administración priorizará la seguridad fronteriza y la repatriación de migrantes como elementos centrales de su política.
Impacto en la economía regional
La posible imposición de aranceles genera incertidumbre entre empresas y mercados financieros, ya que podría afectar gravemente la integración comercial en América del Norte. Según analistas, la economía mexicana podría experimentar una desaceleración si las tarifas entran en vigor, afectando sectores clave como el automotriz, el manufacturero y el agroindustrial.
En el caso de Canadá, el gobierno de Justin Trudeau ha enfatizado la importancia de mantener relaciones comerciales estables con Estados Unidos, pero también ha reiterado su disposición a responder firmemente ante cualquier medida que perjudique a su economía.
Mientras tanto, el gobierno de México no ha emitido una declaración oficial tras el anuncio de la Casa Blanca, aunque se espera que en los próximos días el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, aborde la situación en su conferencia matutina.
Conclusión
El posible establecimiento de aranceles por parte de Estados Unidos representa un nuevo capítulo en las tensas relaciones comerciales de América del Norte. La fecha límite del 1 de febrero está cada vez más cerca, y la incertidumbre sigue creciendo entre los gobiernos y las industrias afectadas.
A medida que se desarrollen las negociaciones y posibles respuestas diplomáticas, la región podría enfrentar un importante punto de inflexión en su dinámica económica y comercial, con implicaciones que podrían extenderse mucho más allá de las fronteras de Norteamérica.